No es la primera vez que hablo de Smart Cities en este blog y, por supuesto, tampoco será la última, no tengo ninguna duda al respecto. Cómo le comentaba a la pareja de un amigo en una reunión informal de hace unos días “las ciudades inteligentes están construyendo en el presente el futuro que las verá crecer”. Susana, que así se llama la pareja de mi amigo, me preguntó si le podía citar ejemplos de ciudades inteligentes, a lo que yo comencé a citar: Tokyo, Zúric, Nueva York, Londres… Entonces, ella me interrumpió para preguntarme: “¿Y Montserrat también?”. Imaginad mi cara de estupor ante su pregunta; en ese momento estaba dispuesto a dedicarle una respuesta con cierto tono condescendiente pero, para suerte para mí, antes de que esto sucediese, ella ya había buscado una noticia en su smartphone que puso ante mí. Y de ahí, este nuevo artículo. 

 

 

La noticia provenía de la web oficial de Cellnex, el principal operador europeo de infraestructuras de telecomunicaciones inalámbricas en Europa. En ella, la empresa informaba que había llegado a un acuerdo de mecenazgo con la Fundación Abadía de Montserrat 2025 para potencia la tecnología y los servicios de conectividad del Santuario de Santa Maria de Montserrat, ubicado en las afueras de Barcelona, y de su entorno.

 

Así que Susana 1, Servidor 0. De esa reunión de amigos extraje 2 grandes aprendizajes ese día: 

 

  1. Nunca descartes aquello que en un principio pueda parecer inverosímil.
  2. Que el progreso y la innovación en el Real Estate puede llegar más allá del cielo y de la tierra (perdón por el chiste malo, pero resultaba casi inevitable colarlo)

 

Una peregrinación hacia el progreso

 

2025 es el año fijado como pistoletazo de salida a este proyecto, dentro del marco de celebración del Milenario del Monasterio. El objetivo del mismo permitirá desplegar un sistema integral de Internet de las Cosas formado por una red de sensores y transmisión de datos, así como por una plataforma informática que será la encargada de la recogida, monitorización, interpretación y gestión proactiva de estos datos en tiempo real.

 

Pero ¿cuál es la finalidad de convertir a Montserrat en una Smart City? Para aquellos lectores que todavía no conozcáis Montserrat, o no tengáis muchas referencias de este enclave, es preciso destacar que se trata de uno de los lugares más visitados en Cataluña, una cadena montañosa tan hermosa a la vista como singular por sus misterios e historia que, justo antes de la pandemia, obtuvo un total de 2.700.000 visitantes (2019), y que su media anual suele estar por encima de los 2 millones. 

 

Con un tráfico tan notable como este, resulta práctico y normal que exista un propósito claro para poder mejorar el servicio a peregrinos, visitantes y a la propia comunidad benedictina que allí habita y cuida del entorno.

 

Smart Santuari (Santuario Inteligente)

 

Algunos de los objetivos principales de convertir a Montserrat en una Smart City son: mejorar la eficiencia en la gestión de aforos, aparcamientos, y controlar tanto la intrusión como elementos beneficiosos para la salud como la calidad del aire. De esta manera, se podrá controlar de manera automatizada, por ejemplo, el aforo de espacios como la Basílica de Santa María o como el del Museo del Monasterio.

 

Para la gestión y control de la calidad del aire, según cita la propia Cellnex en su página web: “…en los lugares de mayor afluencia de público -incluidas las tiendas y los espacios de restauración- se instalarán sensores de CO₂, temperatura y humedad para […] activar, en caso de que fuera necesario, los recursos requeridos para una correcta ventilación de los espacios”.

 

Sin duda alguna, Cellnex y la Fundación Abadía de Montserrat 2025 han sabido leer muy bien hacia donde están evolucionando las ciudades y lo que la sociedad ya está precisando de ellas. 

 

Me gustaría cerrar el artículo agradeciendo a Susana el haberme dado la oportunidad de conocer un proyecto que entronca perfectamente con las necesidades contextuales de una entidad como la Fundación Abadía de Montserrat 2025: trabajar para la inclusión digital, social y territorial a partir de proyectos que mejoren el acceso a la conectividad, acercando la tecnología a las personas y fomentando la mejora de conexiones en territorios y espacios de singular relevancia patrimonial e histórica como Montserrat. 

David Granell Moreno

CEO

Una Smart City llamada Montserrat